Amar la vida
Amar la vida Sentirla ausente, sin embargo Volver a cada ritual Con el cansancio acostumbrado Y la nostalgia de lo perdido. Es ajeno este mundo. No lo reconozco. Miro los árboles Las nubes Los altos edificios Los he visto Durante 44 años. Hoy me son extraños. Yo tenía un hogar. Mi hogar era un ser. El universo cayó sobre mi Cuando ese ser murió. ¿Qué es morir? Me lo pregunto Mientras recuerdo. No ha desaparecido mi hogar Sólo mudó su figura. Vive en alma Y en mi alma arde cada día. Un hogar no muere Se transforma. A través de mi hogar Yo respiraba Devenía Reía y lloraba Yo era. Hay gente Que tiene por hogar Un muro. Mi hogar era tu amor. El mundo podía devastarse Y, aun así El hogar perduraba: Estábamos juntas. Dibujé en mi corazón Un amplio jardín El día que te fuiste Y desde entonces Florezco en ese jardín. Un hogar no es un techo Ni una mesa O una cama. Un hogar Es un encuentro De voluntades Memorias Proyectos. Mi hogar se ha ido al cielo Y me ha llevado con él. Pueden verme